Con la llegada de la primavera, el sol y el buen tiempo empiezan a contagiarnos de energía positiva y ganas de salir a la calle, los días son más largos y las ganas de pasear y socializar se acentúan.
Es muy importante salir a la calle, y es que disfrutar del sol es posible e incluso beneficioso para nuestra salud. Nos aporta vitamina D y nos ayuda a remitir problemas como la psoriasis o el acné. Pero tenemos que ser conscientes de los riesgos que corremos si no lo hacemos de un modo responsable.
Si tomamos el sol sin la debida protección y de un modo prolongado, se pueden producir daños en la piel como; quemaduras, envejecimiento prematuro o melanomas cancerígenos. Es muy importante que todos nos protejamos la piel pero hay que tener especial cuidado sobre todo con la piel de los niños y de las personas mayores.
Ya que su piel es mucho más sensible y susceptible de sufrir algún problema.
Para evitar estos efectos negativos del sol, es importante tomar medidas preventivas. Una de las más importantes es aplicar protector solar antes de salir al sol. El protector solar debe tener un factor de protección alto (SPF 30 o superior) y aplicarse generosamente en todas las áreas expuestas al sol.
Si no la protegemos adecuadamente, a la hora de salir a pasear es importante cubrir la cabeza y los ojos, además de beber abundante agua para mantener la piel hidratada y evitar la deshidratación.
A demás, queremos recordar que estas medidas no solo deben aplicarse durante el verano o en días calurosos. Los rayos UV pueden ser igual de dañinos durante cualquier época del año, incluso en días nublados o lluviosos. Por lo tanto, es recomendable incorporar estas precauciones en nuestra rutina diaria, especialmente si pasamos mucho tiempo al aire libre.
Otro factor a tener en cuenta son las franjas horarias, a primera hora de la mañana y a última hora de la tarde son las horas donde el sol es menos dañino, en cambio en las horas de mediodía hay que evitar todo lo posible salir a la calle y exponerse al sol.
Por tanto podemos decir que, el sol es indispensable en la vida de las personas, ya que entre sus múltiplos beneficios podemos destacar los siguientes: disminuye la presión sanguínea, reduce la incidencia de infecciones respiratorias, reduce el colesterol en sangre e incrementa la hemoglobina, mejora la respiración y aporta vitamina D para calcificar los huesos.
Disfrutar del sol es beneficioso para nuestro cuerpo y nuestra mente, pero debemos hacerlo con precaución.
Aplicar protector solar, evitar la exposición en las horas más intensas, usar ropa protectora y mantenerse hidratado son medidas esenciales para disfrutar del sol de manera segura y saludable. Así que recuerda, ¡Buen tiempo, buena cara! pero con precaución.
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