Es de vital importancia prevenir las escaras o úlceras por presión. Siempre va a ser mucho mejor prevenirlas que tener que curarlas.
A menudo los cuidadores de personas encamadas o con movilidad reducida tienen la preocupación de evitar por todos los medios la aparición de lesiones que pueden empezar con un simple enrojecimiento de la piel, pero que pueden convertirse en una úlcera.
Las escaras se producen por distintos motivos, pero los principales causas son: la falta de actividad y movilidad, presión constante de piel, incontinencia, falta de higiene o cuidados específicos, así como una dieta inadecuada.
En la mayoría de los casos las zonas más afectadas son los glúteos, aunque también se producen en los tobillos, en la nuca, en los codos y en los hombros, por este motivo es fundamental prestar especial atención a estas zonas de mayor riesgo.
Las úlceras por presión suelen ser bastante dolorosas y su curación es lenta, por tanto hay que tener especial cuidado con las zonas dañadas, aunque en ocasiones es inevitable que aparezcan.
Algunos consejos para evitar y cuidar las úlceras por presión
Cuidados diarios:
– Mantener la piel limpia y seca.
– Utilizar jabones neutros.
– Proteger siempre la piel de la humedad y utilizar cremas hidratantes protectoras.
– Fomentar la ingesta de agua y líquidos para mantener la hidratación.
– Realizar con frecuencia cambios en la postura y si es posible realizar pequeños movimientos.
– Utilizar superficies de apoyo para distribuir la presión.
– Supervisar la herida con regularidad.
El cambio de postura es imprescindible para evitar la aparición de escaras, normalmente se recomienda el cambio postural cada 3 o 4 horas.
La higiene también es de vital importancia, sobre todo en las zonas más expuestas, hay que lavar, desinfectar, secar e hidratar a diario para que la piel esté sana y cuidada.
Por último siempre es bueno contar con alguna ayuda técnica. Esto nos va a facilitar el día a día, además de proporcionar mayor bienestar a la persona encamada. Hoy en día contamos con diversas ayudas, las más demandadas son los cojines, almohadas, colchones y las taloneras, entre otros.
Si la herida persiste es necesario acudir al médico o especialista para que pueda examinarla y realizar un diagnóstico adecuado al paciente.
Nuestro equipo de profesionales estará encantado de ayudarles, apoyarles y aconsejarles, nuestro objetivo es siempre mejorar la calidad de vida del usuario y velar por su bienestar.
Galo Ayuda a Domicilio trabajamos cada día para ofrecerles la calidad de vida que se merecen.