La artrosis una enfermedad que afecta e incapacita a muchos de nuestros mayores.
Las enfermedades que afectan a las articulaciones, especialmente la artrosis, son muy frecuentes en las personas mayores .
La artrosis es una enfermedad crónica caracterizada por el progresivo deterioro de la articulación, principalmente afecta en manos, rodillas, caderas o en algunas articulaciones de la columna vertebral.
Los síntomas más frecuentes que presenta son:
- Dolor en la articulación, normalmente se produce cuando se utiliza dicha articulación y se pasa cuando se relaja o se deja en reposo. Aunque cuando la enfermedad está avanzada el dolor puede ser constante.
- En algunos casos, la enfermedad produce rigidez, principalmente a la hora de levantarse debido a que la articulación ha permanecido muchas horas en reposo.
- También se caracteriza por provocar malformaciones e inflamación en las articulaciones.
- Por último cuando la enfermedad está muy avanzada puede provocar pérdida de movilidad.
El diagnóstico de la artrosis en mayores se establece basándose en la exploración clínica y en unos resultados radiológicos característicos.
En cuanto al tratamiento, los principales objetivos que se deben tener en cuenta al enfrentarse a esta patología son el control del dolor y reducir al máximo la incapacidad que provoca. Hoy en día existen distintas alternativas y herramientas farmacológicas y no farmacológicas.
En cuanto al tratamiento no farmacológico, hay que destacar programas de fisioterapia, técnicas de relajación, hidroterapia y técnicas de calor y frío.
En cuanto al tratamiento farmacológico, cabe destacar los analgésicos, antiinflamatorios, inyecciones intramusculares y en los casos más graves se puede llegar hacer una cirugía o sustituir esa articulación por una prótesis.
Es importante estar alerta y ante cualquier síntoma de los descritos anteriormente debemos acudir al médico para que valore y haga un diagnóstico adecuado para poder atajar la patología lo antes posible.
Desde Galo Ayuda a Domicilio, os recordamos la importancia de realizar a diario ejercicio físico y llevar siempre una dieta sana y equilibrada, para mantener nuestros huesos y articulaciones en el mejor estado.
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